A los pocos días de entrar a la escuelita, Octavio se enfermó de la gripa y la tos, por lo que dejamos de llevarlo. Así que el proceso de adaptación a esta nueva etapa se ha alargado, porque cuando por fin, después de semana y media resguardado en casa, pudo regresar a la escuelita, no deja de llorar, pidiéndome que no, que no lo deje ahí. Después, al regreso, ya lo encuentro contento y tranquilo.
Yo también me enfermé, en medio de muchísimo trabajo. Ahora sí me he sentido agotada y estresada con tanto trabajo y queriendo pasar más y mejor tiempo con mi pequeño. La tos no ha querido abandonarme casi durante dos meses y apenas en estos días empiezo a sentirme mejor.
De no haber sido por la invaluable ayuda de la abuela que vino desde Pachuca a pasar dos semanas en nuestra casa, yo no habría podido sacar adelante mis entregas de trabajos encimados, atender la casa y la comida, apoyar al papá y ver lo que Octavio tiene que llevar a la escuelita.
Me sigue preocupando la ausencia de habla de Octavio, que ya tiene 28 meses. Ya tengo algunos datos para recurrir en busca de ayuda con profesionales, sólo estoy dando un poco más de tiempo. A ver si la escuelita le ayuda en el tema del habla y el carácter. Por lo menos sí lo noto menos agresivo, ya casi no hay pellizcos ni golpes, pero sí, muchos gritos.... en fin...
Sin duda, repitiendo lo que leo en uno de mis blogs gurús, si yo estoy bien, mi niño estará bien. Si estoy menos estresada, seguro él también lo estará. Si todo fluye, fluirá también nuestro bien común.
Espero que las cosas mejoren. Con respecto al habla del chiquito, sólo te diría que consultes si sientes de verdad que eso te va a dar tranquilidad. No me extrañaría que te dijeran que cada uno tiene su ritmo. Hablará finalmente como todos los pequeños, ya verás.
ResponderEliminarY en cuanto a tu tranquilidad, pues ya sabes lo que hemos ido aprendiendo en el camino. Me queda grande lo de blog gurú, pero me alegra saber que quizás nuestra experiencia pueda ayudarlos. Ten paciencia, mucha. Contigo, especialmente. Y no te pidas más de la cuenta. Estar bien implica también tratar de no agobiarnos y aprender a estar.
Un gran abrazo.
Yarim es tan horribles el "periodo de adaptación", te cuento que mi niña también enfermo a las 3 semanas de algo como rubéola contagiado porsupuesto en la escuela, no fué 1 semana y el lunes siguientes era un no parar de llorar y angustiadisima con el "no voy a la escuela mamá" se abrazaba a mi pierna, no pude Yarim, sentimos que le creabamos mucha más angustia que bienestar, así que ya no asiste a la escuela desde ésta semana, ha regresado a casa de la abuela las 4 hrs que yo trabajo y con eso regresó mi niña feliz, sin angustias, ni preocupaciones, esperaremos al siguiente ciclo escolar que ya irá con 3 años y espero ya sin pañal... no pude con la angustia y el sufrir de mi hija... espero que después todo sea mejor... y creeme nadie te entiende como yo, no te preocupes por el habla, tengo un dobrinito que el 14 de feb cumplió 3 años y su hablar es casi nulo y las pocas palabras que dice no son entendibles, pero él está bien, es un niño sano, simplemente su tiempo para hablar es diferente.
ResponderEliminarAbrazos
:) hace poco me encontré al maestro villar me preguntó tus datos porque quiere un catalogo . asi q seguirás con chamba. que bueno que en este aspecto las cosas sigan fluyendo.no?? por tu preocupación de el pequeño octavio <3 chalito mi sobrino tiene 4 años recién cumplidos y medio se le entiende. yo creo que los niños de ahora son de pocas palabras. abrazos!!
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