miércoles, 14 de diciembre de 2016

Enorme sonrisa

Mis regalitos de Navidad ya los he ido recibiendo en microdosis de satisfacción. Cuando pienso en cuánto hemos cambiado, desde que Octavio lloraba inconsolablemente cuando íbamos en el coche y veía que dábamos vuelta en el crucero, dirigiéndonos hacia su primera escuelita: la guardería en la que estuvo cuando era un bebé de año y medio... Hasta estos días, en que con su mochila en los hombros y su botella de agua al cuello, ha logrado entrar sólo a la Primaria, caminar el largo pasillo, rodear por la cancha y llegar hasta su salón. Él es consciente de su logro, se sabe un niño grande y se siente emocionado. Voltea a verme con su gran sonrisa y su seña de "muy bien" en su mano. Y yo, con el ojo "Remi" y el corazón henchido de amor, le mando besos y porras desde la reja.
Soy la cursi mamá, orgullosa de las grandes batallas libradas de mi pequeño, mínimas para todos, grandes para nosotros. ENORMES logros de Octavio, enormes como su sonrisa...

domingo, 21 de agosto de 2016

Agradecimiento

A Octavio le gusta ver la larga tira de créditos del final de las películas, los nombres de toda la gente involucrada en la producción. Cada una de las personas son muy importantes porque juegan un papel central, por mínimo que parezca.

Hoy es un buen día para agradecer. A un día de iniciar el nuevo ciclo escolar, nuevos y grandes retos están por comenzar para nosotros. Hoy quiero reconocer a todas y cada una de las personas que han aparecido en nuestro camino, ellas quienes nos han ayudado, aconsejado, escuchado, consolado, animado, guiado, recibido, enseñado, regañado, acompañado. Todos quienes han estado ahí y por quienes hemos podido llegar hasta el día de hoy. Un largo camino hemos recorrido y otro más largo comienza con el paso a la Primaria.

Así que, como en el cine, esta es una lista de todas las muy importantes personas de nuestra película, a quienes solamente podemos decirles GRACIAS desde lo más profundo de nuestro corazón.

En el momento más difícil
Náhuatl Vargas
Claunnia Ayora

CESE
Emma Luisa Lucero
Tzendal

Asociación de Autismo
Leticia Colina
Lizbeth Ramos
Alan Jair
Rosaura Demuner
Alicia Anzueto

Tribu Libemor
Lorena Ramírez
Nayeli Bernal
Alicia Bautista
Ivon Téllez
Lizarely Servín
Dulce Osorio

Bunko Papalote
Alba Manrique
Norma Tellez

CEDAA
Rosa Virginia Martínez Conde
Daniel González
David Torres
Claudia Vega
Rebeca Márquez
Nahúm Sánchez
Salvador Zepeda
Nessde Márquez
Linda Jeni Nuñez
Jonathan Martínez
Angeles Velásquez
Mauro Hernández
Dulce Tapia
Edna  Hernández

Preescolar Ramón  López Velarde
Maestra Blanca
Maestra Ángeles
Maestra Ana Luz
Maestro Carlos
Maestro Marco Polo
Maestro Gonzálo

USAER C8
Maestra Nayanith
Maestro Raymundo

Apoyo Complementario CAM 29
Maestra Martha Luna
Maestra Irania
Maestra Luz

Doctorado en Investigaciones Cerebrales U.V.
Rosalba Aguilar

Fundación Santiago Miranda Fernández
El equipo de terapeutas y maestros de natación de la alberca Delfines
encabezado por la maestra Aurora Guadalupe Rojas

Las maestras sombra, amorosas guías 
Luz Hernández
Mayra Luna

ESPECIALMENTE
Liliana Barrientos por su ayuda sustancial para poder dar el paso hacia la incusión escolar en una escuela regular y hacerlo realidad.

Hoy nos esperan nuevos pasos y un futuro prometedor para nuestro niño.



Sin ustedes, no hubiéramos podido llegar hasta el día de hoy.

Gracias a todos, GRACIAS, GRACIAS


martes, 19 de julio de 2016

Valiente

Eres tan valiente y te admiro. 
Por regresar tan emocionado a tu alberca. 
Por ponerte el gorrito y los goggles. 
Por quedarte en shock sin entender nada, porque no sabías que estarías entre tantos niños. 
Por tus lágrimas y tu angustia. 
Por tu fuerza para reponerte. No pasa nada, es nuestro mantra.
Cada vivencia tuya se te vuelve experiencia y yo se que tengo que soltarte y acompañarte desde el otro lado.
Te vi como un niño, como a todos, entre todos. Me enterneciste.
No puedo más que amarte y estar contigo cuando necesites mi mirada y mis abrazos...



domingo, 29 de mayo de 2016

Tiramos la toalla...

...en la playa


Le cumplimos una promesa a Octavio...


Hicimos una pausa y logramos regalarnos un tiempo necesario para nosotros como familia, para recuperar energía y poder continuar con los deberes cotidianos...



Lo disfrutamos mucho y nos prometimos no tardar tanto en regresar al mar...


viernes, 20 de mayo de 2016

Abril

Las niñas del salón del ciclo escolar pasado estaban jugando, de pronto Abril, una niña excepcional, le preguntó a Mayra, la maestra sombra de Octavio:

-Mayra, tú que estudiaste?-
-Ah, yo estudié psicología- le contestó Mayra

Abril regresó a jugar con las demás niñas, pero su carita inteligente denotaba que seguía buscando una respuesta. Después de un rato volvió a acercarse a Mayra y de nuevo preguntó:

-Mayra, ¿pero con lo que estudiaste, también puedes ser maestra?
-Sí, también puedes ser maestra-

Entonces Abril, corrió hacia las niñas, feliz y satisfecha, porque ahora tenía una certeza:

¡Ya sé que quiero ser de grande!

Voy a ser psicóloga, para ser maestra y poder ayudar a los niños como Octavio...

La mamá de Abril me contó que la niña lamentó mucho no haberse podido despedir de Octavio, élla se iba a la primaria y él se quedaría otro año en preescolar. El último día, Abril le llevaba una plantita de regalo con una carta, pero se le olvidaron en su casa y como viven muy lejos, ya no pudieron regresar por ella. Luego Octavio salió un poco antes de vacaciones y ya no se volvieron a ver.

Lo que estoy segura que nunca olvidará Abril, es el haber conocido, convivido, apoyado y guiado a Octavio con mucho cariño. Ninguno de los niños del grupo hizo ninguna distinción, pero élla sí, con un sentido amplio e inclusivo. Abril con su sensibilidad y percepción, sabía que Octavio es diferente y que necesita más apoyo que los demás niños, así que con mucha determinación fue su gran amiga todo el ciclo escolar y junto con Ariel, otra hermosa niña de su grupo, siempre estuvieron al pendiente de él.

Abril es de las niñas que nos han dejado una gran huella, igual que el resto de los niños del ciclo pasado y de este, que está a punto de terminarse.

Me conmovió mucho esta anécdota cuando Mayra me la contó. Me hace feliz darme cuenta de que Octavio y Mayra también le dejaron una huella a Abril, le sembraron una semillita, un deseo que quizá el tiempo vuelva vocación: servir y ayudar... inclusión y amor...

Que así sea, Abril...

Gracias Mayra, por todo tu cariño y la luz con que has guiado a Octavio durante su vida preescolar... tu huella será permanente en nuestro corazón. Mi reconocimiento para tí.




sábado, 2 de abril de 2016

Corro por el autismo...corro por Octavio

Estoy muy agradecida con mi familia y amigos que con orgullo corrieron hoy por Octavio. Sentí su compañía, su interés en aprender sobre el autismo y su esmero por comprender cada situación. Les agradezco su cariño y su presencia. Me emociona saber que cuento con ustedes.






















Yo todos los días corro por el autismo, pero hoy lo hicimos acompañados y así quiero sentirme siempre, respaldada por ustedes, sintiendo su amor y comprensión. ¡GRACIAS!



domingo, 27 de marzo de 2016

Dibújame un cordero...

...Y a Octavio...
...Y un Yoda...
...Y a papá en el mar...
...Y a papá en el mar con Octavio...
...Y a R2D2...
...Y una iglesia...
...Y a Mahatma Gandhi...
...Y a Cristina Pacheco...
...Y a Octavio que se va a dormir...
...Y a papá, mamá y a Octavio...










viernes, 25 de marzo de 2016

¡Vamos al TEAtro!

Estoy convencida de que exponer a los niños desde temprana edad al arte los transformará en más sensibles y mejores seres humanos. Soy mamá de un niño al que he querido acercar al arte y a la cultura como parte de su formación inicial. Sin embargo, muchas veces me he topado que en varios de los eventos que se anuncian para público infantil, parece que no hay cabida para los niños que no tienen un desarrollo típico. Para un niño con autismo, como en el caso de mi hijo, es complicado permanecer o su manera de disfrutar de conciertos, obras de teatro o funciones de cine no es la socialmente permitida así que en más de una ocasión hemos tenido que salir huyendo del lugar en medio de gritos y frustración, por la presión social e intolerancia del público ante la presencia de un niño que no se comporta "bien", como el resto de los niños.

Por eso tengo este sentimiento tan atravesado como una dolorosa espina y ha sido lo que me impulsa a sacar mis habilidades en la gestión cultural y trabajar para lograr que en Xalapa, nuestra tan autoproclamada, culta ciudad, en verdad exista una cultura inclusiva que sea tolerante y respetuosa con los públicos diversos. 

Esta será nuestra primera experiencia en el teatro donde el público serán niños con autismo y sus familias. Espero que este sea el punto de partida y podamos lograr que se replique en otros espacios culturales. Que la orquesta sinfónica, las salas de cine, las compañías de teatro programen regularmente funciones incluyentes donde las personas con condiciones distintas puedan ser partícipes y que no tengan que verse excluídas, junto con sus familias, de su DERECHO al esparcimiento y la recreación. Que exista un cambio de actitud en los foros, beneficiando a nuestros niños con ambientes relajados, respetuosos y amables.


jueves, 17 de marzo de 2016

Para siempre

Hoy los niños dramatizaron uno de los Cuentos del Rincón que hablaba de la muerte... Muy triste y muy bonito, porque hablaba de cómo recordar a los seres queridos que se han muerto. Se me salieron las lágrimas... por Dante. Hace casi un año y aún no me cae el veinte, siento que no se ha ido, siento que está en algún lado y que podré verlo de nuevo....



PARA SIEMPRE
Durant, Alan. Gliori, Debi. 
La nutria, el topo, el zorro y la liebre formaban una gran familia; pero un día el zorro se puso enfermo y se murió. Todos estaban muy tristes, pero en sus corazones, recuerdos y en su sonrisa el zorro seguía allí, a su lado … para siempre.

martes, 15 de marzo de 2016

La tía Dunia, madrina de la carrera Corro por el Autismo 2016















Mi sobrino se llama Octavio y tiene trastorno del espectro del autismo. 

He tenido grandes experiencias con él. Desde que nació me conquistó, era un bebé muy risueño. Después yo me fui a vivir a San Luis y no tuve mucho contacto con él desde entonces, pero en las ocasiones en las que voy a visitarlo me da mucho gusto verlo, me encanta que le guste nadar, que le guste bailar y me hace reír mucho cuando nos canta la canción del Torito Jarocho. Me dio mucha emoción verlo bailar y ser feliz el día de mi boda. 


Siento un gran compromiso al formar parte de esta causa, ya que tengo el deseo de cumplir el propósito que tenía mi padre antes de morir, que era el de llevar a Octavio a una escuela especial para que le dieran la atención adecuada. Entonces aquí estamos echándole todas las ganas para apoyar a Octavio y a la familia del Cedaa, a hacer conciencia en las personas para que aprendan no juzgar, a ser inclusivos y a ponerse en los zapatos del otro.

Dunia Gómez, marzo de 2016



lunes, 7 de marzo de 2016

Vuelta a casa

Llegué al Jardín de las Esculturas del IVEC cuando estaba terminando la carrera y me convertía en una diseñadora recién egresada. En el Jardín pasé muchos buenos momentos, en un ambiente laboral y de amistad que no he vuelto a encontrar en otros lugares. En el Instituto Veracruzano de la Cultura (IVEC) que sentí como mi casa por muchos años, me desarrollé y crecí profesionalmente, hice diseños para muchos artistas, para exposiciones, hice portadas de libros, diseñé catálogos, invitaciones, carteles. Luego, me fui para caminar por la libre, pero siempre recuerdo ese lugar maravilloso, lleno de caminos que suben y bajan, lleno de verde y luz, donde pasé mi juventud, diseñé con pasión y disfruté del amor... 

Hoy volví al Jardín, de una manera en que jamás hubiera imaginado. Me invitaron a un foro para padres para dialogar en torno a la discapacidad. Y me doy cuenta de que me gusta aportar, me gusta aprender, escuchar a quienes van caminando adelante de mí. Me siento cercana a gente extraordinaria que, si no fuera porque apareció el autismo en mi vida, no hubiera tenido la oportunidad de conocer, coincidir, compartir, conmoverme junto a ellos.

La vida me ha ido poniendo cerca a la gente que le da sentido a lo que soy ahora. Así que todo lo que he vivido, ha tenido que ser para llegar a este momento. Hoy, que puedo volver al Jardín de mis amores y hablar del amor, este que me ha convertido en la mujer, la mamá, la diseñadora que aporta con un granito de arena para la construcción de un mundo mejor para todos, especialmente, para ellos, nuestros hijos...









martes, 2 de febrero de 2016

Hoy lo ví

Hoy lo ví.
Sentado, solo, en una mesita de una cafetería de la plaza a donde fuimos a hacer los pagos. Estaba de espaldas, leyendo un libro y tomándose un café. Su ropa en los tonos neutros de siempre, su cuerpo ancho de los últimos tiempos, la forma de su cabeza, su peinado característico lleno de gris y blanco.
No pude dejar de mirarlo. —Sí, es él!— pensé sorprendida. Sentí el impulso de hablarle pero seguimos caminando hacia el banco, donde pasamos uno de esos momentos incómodos en los que las diferencias se remarcan y yo sólo deseo salir huyendo, pero no tenía otra opción más que hacer la inmensa fila, sabiendo que estábamos en el caldo de cultivo para una crisis.
Y sucedió.
-SHHHHHHHHH!!!!!!!- Nos calló muy molesto un señor.
-Es un niño con autismo, señor, qué intolerante!!!- Le respondí yo, muy molesta también.
Alguien benevolente nos ayudó a pagar para acortar el tiempo de espera y salimos del banco. Octavio agripado, cansado, acalorado, hambriento, llorando. Yo, con el nudo en la garganta, apenada y alterada por la presión (e incomprensión) social....
Y lo ví de nuevo. Seguía, ahí sentado con su café y su libro....
—Dante! hola Dante— Quise correr a decirle y abrazarlo...
—Mi chula, cómo estás?— Quise escucharle, con su armoniosa voz y su cara sorprendida por encontrarnos.
—Triste, Dante, me choca que me pasen estas cosas— Le respondería
—Ay, viejito— Le diría él a Octavio, mirándolo amorosamente.
Pero no me atreví a hablarle, no quise desilusionarme al comprobar que no era él, no quise ver la cara de un señor que no era la de mi papá. Así que seguimos caminando y nos fuimos de ahí, con una gran añoranza a cuestas....